Estos días he hablado con el viento, me ha contado lo hermoso que se ve tu cabello, el perfume que envuelve tu cuello, todo aquello que hace de tu ser algo bello.
Me contó que te vio llorar, y no lo puedo evitar, el no verte me hace estallar.
Cuantas cosas te quisiera dar, como dos grandes alas para que pudieses volar, así ya no te tendría que visitar, solo vendrías a ver una película en el sofá, pero te aseguro que no la vamos a terminar, así suele pasar.
Seríamos dos pajaritos dispuestos a soñar, volaríamos hasta encontrar el perfecto hogar... El que está en cada beso que me das.
El mar harto está de que lo compare con tu caminar, con tu profundidad, es que si algún día estuvieras en mi lugar, te aseguro que nunca te volverías a enamorar.
Tus ojos le robaron la inmensidad al océano, y con ellos el misterio de su interior.
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